PROBIÓTICOS

¿Qué son realmente los probióticos?

Son microorganismos vivos que, en teoría, aportan beneficios a tu salud intestinal. Pero ojo:

• No todas las cepas hacen lo mismo.

• No todos los intestinos los reciben igual.

• No todas las fases de un tratamiento los permiten.

En un contexto como el SIBO, por ejemplo, tomar probióticos sin criterio puede aumentar la hinchazón, los gases o el malestar.

¿Cuándo pueden ser un problema?

• Si los tomas “porque sí”, sin saber si tu microbiota los necesita.

• Si estás en fase activa de sobrecrecimiento bacteriano.

• Si los compras sin respaldo clínico (marca, cepa o dosis inadecuada).

No es solo “tomar un yogur” o una cápsula cualquiera. La clave está en qué cepa, en qué momento y cómo acompañarlo con tu alimentación y tu tratamiento digestivo.

¿Cuándo sí ayudan?

• Cuando hay un diagnóstico claro y personalizado.

• Cuando se selecciona la cepa adecuada según tu caso (no vale cualquiera).

• Cuando forman parte de una estrategia de fondo para restaurar tu microbiota y no solo como parche temporal.

En consulta, reviso cada caso de forma individual. No todos mis pacientes toman probióticos. Y los que sí, lo hacen en el momento correcto, con la cepa adecuada y con seguimiento.

Lo que nadie te dice sobre los probióticos

• A veces sí los necesitas.

• A veces debes evitarlos.

• Y otras veces… primero hay que preparar tu cuerpo antes de introducirlos.

Los probióticos no son ni ángeles ni villanos: son herramientas, y el secreto está en saber cómo y cuándo utilizarlas.

Entonces, ¿necesito probióticos o no?

No hay una respuesta única. Cada intestino es diferente y lo que a una persona le ayuda, a otra puede empeorarle los síntomas.

Si quieres saber si realmente necesitas probióticos y cuáles serían adecuados para ti, puedo guiarte paso a paso.

Lo que nadie te explicó antes de tomarlos

• ¿Y si me tomo unos probióticos?

• Me dijeron que me iban a mejorar, pero me puse peor.

• ¿Qué probiótico recomiendas para SIBO?

¿Te suenan estas frases?

No eres la única. Los probióticos están de moda y parecen la solución mágica a todos los problemas digestivos. Pero la realidad es que… no siempre ayudan. A veces son tus mejores aliados, y otras, pueden empeorar los síntomas si se usan en el momento o la forma equivocada. Este tema genera muchísima confusión. Y es normal.

¿ángeles o villanos?